miércoles, 26 de noviembre de 2008

...Erase que se era, en un lejano reino, una princesa a la que jamás nadie había visto sonreír. El rey había gastado toda su fortuna en traer al castillo los mejores bufones, sin resultado alguno.

Un día, mientras la princesa paseaba por el bosque, escondida tras la maleza pudo observar como un risueño joven que andaba despistado resbaló, cayendo de bruces en un estanque cercano. De pronto el semblante de la princesa cambió, y lo que comenzó como una sonrisa derivo en una atronadora carcajada.

El joven pedía auxilio en el agua, y la princesa reía y reía. Hasta que el cuerpo del joven quedó flotando sin vida en el estanque, la princesa observo entonces aterrada el reflejo de su gesto descompuesto, provocado por aquellas carcajadas.

El cuerpo de la princesa fue encontrado tambaleándose al final de una cuerda junto al estanque...

sábado, 22 de noviembre de 2008

Complices

Lo buscaba sin conocerlo.
Él no había llegado, porque yo no había venido, aun así ambos estábamos hablando; no nos escuchábamos porque no había nada que decir, y para qué decir nada, si estaba sorda y él era mudo.